El reparto estelar no vino gratis pero sí de forma barata. Bel Ami es, en palabras de Donnelan, “una película de bajo coste”, con un ínfimo presupuesto de unos 7.5 millones de libras, Budapest se convirtó en París durante 10 días de entre todo el rodaje de ocho semanas. Todo el mundo trabajó por mucho menos que lo que suelen cobrar, incluído Pattinson.
“Leyó la novela y además un libro que escribí sobre la actuación,” dice Donnellan, de 59 años, “e insistió en hacer ensayos durante cuatro semanas antes de que filmásemos nada, lo cual es algo que no se oye en Hollywood. Quiere crecer como actor y se lo toma muy en serio. Realmente, él nunca ha llegado a decir nada negativo sobre Twilight pero en sí, nadie quiere estar en una franquicia como esa para siempre.”
Pattinson claramente se dio cuenta de la oportunidad que tenía para acabar con la imágen romántica de Edward Cullen, y la cámara de Ormerod captura algo reptilesco y despiadado en sus hermosos rasgos. “Él estaba decidido a mantenerlo a ese nivel,” dice Ormerod. “Por eso es por lo que lo hizo,” añade Donnellan. “Dijo, ‘Interpreto a un personaje sin puntos a favor’.”
Fuente: ThisIsLondon vía RPLife
Traducción: TTS
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